Hoy en el blog de nuestro sex shop, un especial sobre aquellos preliminares que a parte de ayudarnos a potenciar nuestra relación de pareja nos harán tener un sexo mejor.
Con frecuencia olvidamos lo importantes que son los preliminares en el momento del sexo. Los de “aquí te pillo, aquí te mato” están muy bien, son excitantes y mantienen un buen nivel de tensión sexual de una pareja, pero la práctica de unos buenos preliminares harán que sea mucho mejor. En general las mujeres están acostumbradas a creer que la mayoría de los hombre solo piensan en sí mismos, ya que les gusta ir directos al meollo de la cuestión, pero lo cierto, es que disfrutan tanto como ellas de los preliminares.
Te proponemos algunos pasos para llevar a cabo con tu pareja antes del sexo en sí.
Besos de película.
La idea de que sólo a las mujeres les prefieren besar es equivocada. A los hombres les encantan los besos y más aquellos que son apasionados y profundos, especialmente cuando los alternan con besos que recorran otras zonas corporales.
Tienes que hacer saber a tu pareja que vas a alargar el momento todo lo que puedas, y por lo tanto, besa de forma profunda y apasionada. Intenta besar zonas que puedan resultar erógenas a tu pareja, como el cuello, las orejas, la clavícula y alternar los besos diciéndole suavemente cosas al oído.
Acerca la mano al sexo de tu pareja y rózalo ligeramente sobre su ropa… no hay que ir con prisas. Recuerda el momento en que por primera vez decidiste dar el salto y tener relaciones sexuales. Intenta recrear el sentimiento de ansiedad, lujuria, y la intensidad de los sentidos a flor de piel que se dan en ese momento.
Masturbación compartida.
La visión de tu pareja masturbándose puede ser un potente subidón antes del sexo. Muchas mujeres sienten vergüenza ante el hecho de masturbarse ante su pareja, pero lo cierto es que para la mayoría de los hombres es una visión que les sube la temperatura al máximo. La excitación que les produce ver a una mujer tocándose a si misma es enorme.
Se puede excitar a un hombre rápidamente realizando una masturbación ante él, en lugar de que se ocupe él mismo. Ellos no pueden resistirse ante esa imagen y les produce un placer erótico inigualable.
La provocación es poder.
El poder que proporciona la provocación es evidente. La provocación puede hacer subir el nivel de la temperatura sexual y las ganas de sexo. El sexo oral, por ejemplo, aumenta el placer de un hombre o una mujer ante el acto sexual, pero lo mejor es dejarlo a medias y con ganas de más, ya que así estás provocando que la intensidad de su deseo sea aún mayor de lo que ya lo era. La provocación puede iniciarse en la zona de la parte superior del cuerpo (cabeza, cara), en el que un paseo con la lengua por algunas partes de esta zona podrán servir como apertura del momento. Al cabo de unos minutos puedes regalarle un tiempo de “handjob” pero siempre dejando a tu pareja con ganas de más.
Ese es el poder que puede utilizarse en esos momentos para conseguir subir la necesidad de tu pareja por ti. Unos besos y caricias en zonas erógenas del cuerpo mantendrán el momento a buena temperatura si además lo acompañas con alguna que otra penetración pero muy cortas, de forma que volverás loca a tu pareja queriendo más. Si le das un poco querrá más con ansiedad y te rogará por que se lo des. Este juego no debe alargarse demasiado, ya que puede perderse el interés y su excitación si llega a estar demasiado tiempo sin obtener su recompensa.
Lenguaje para poner a tono.
Una de las cosas más sorprendentes del sexo es la importancia que puede tener el hablar de forma sucia a un hombre durante el sexo. Les encanta que les toquen, pero si se acompaña de unas palabras juguetonas y algo picantes aumentará su excitación. Acompaña los besos con posteriores comentarios sexuales de lo que te apetece que hacerle o que te haga, según si prefieres que sea algo especial para él y aumentar sus expectativas de lo que le vas a hacer o si prefieres guiarle para que sepa lo caliente que estás y qué necesitas tú. Aquí juega tu propia decisión de ser el elemento pasivo o el dominante.
Estas indicaciones son algunas de las cosas que pueden hacer que el sexo en sí sea algo más. La práctica de algunas de estas sugerencias de juegos preliminares harán que la relación sea mucho más potente y subirá la temperatura de tu pareja haciendo que desee más de ti. Y recuerda que todo esto lo puedes combinar utilizando tu conjunto de lencería preferido, con nuestros juguetes para parejas o con un buen masaje…
Esperamos que alguno de estos consejos te sirvan y disfrutes con tu pareja.
Y si todo esto os ha puesto demasiado a tono, podéis consultar el artículo sobre las técnicas de control de la eyaculación.